A nuestro correo nos llegó la siguiente pregunta: ¿es correcto protestar si me contratan para una cosa y termino haciendo otras funciones en la oficina?
¡Buena pregunta! Es algo que suele suceder y como reaccionar ante esta situación; dependerá de las aspiraciones que Usted tenga en su carrera profesional. Como dice el dicho, ” no hay mal que por bien no venga”. Pudiera ser que el hecho de que la contraten para una cosa y que luego termine haciendo otra sea su oportunidad para aprender más cosas. Podría ser ese momento que le permita destacar como un (a) profesional que es flexible al cambio y que acepta nuevos retos. Recuerde que las empresas y organizaciones, en este mundo globalizado, pasan por procesos de cambios constantes. Usted debe ser capaz de manejar el cambio y de seguir el ritmo de las empresa.
Lo que si es que Usted debe sopesar que la remuneración que Usted reciba sea acorde a estas nuevas cosas que le piden que haga. De repente tenga que ver si cabe la posibilidad de algún ajuste a los términos de compensación que originalmente pactó. Y cuando digo compensación, no sólo me refiero a salario en moneda. Usted perfectamente, si fuese necesario, pudiera negociar algún otro tipo de beneficio que le convenga tanto a Ud. como a la empresa. Aquí es donde debe demostrar su competencia de negociador (a).
Claro, también puede darse el caso, que el cambio de actividades sea muy brusco; tanto que a Usted no le agraden las nuevas tareas y no sienta que es algo de lo que va a aprender o a aportar a la empresa. En ese caso, pienso que lo más sano es siempre hablar con su Jefe y buscar negociar lo que ambos beneficie. Si Usted fue contratado (a) por la empresa es porque valoraron su trayectoria, así que debiera existir la apertura de dialogar.
En verdad, siento que son mejores las opciones de dialogar, de negociar a la de protestar. En estos dorados tiempos, en los que las oportunidades son escasas, el protestar puede traerle consecuencias negativas No querrá Usted, por esa confrontación, encontrarse trabajando en un ambiente incómodo u hostil. Eso si sería en detrimento de su salud mental y hasta física. Debe pensar que afuera la calle está dura como dicen. Sin embargo, siempre hay opciones, distintos caminos que tomar, pero eso sólo puede decidirlo Usted. Yo sólo le hago reflexionar sobre algunas aristas de esta situación. Espero le sirva y sigame escribiendo a través de este gustado blog.
¡Hasta la próxima!